Conservación ex-situ de muestras de individuos vivos completos o parte de sus tejidos o estructuras con capacidad reproductiva, genéticamente representativas de una población. La conservación ex-situ se define como la conservación de muestras genéticamente representativas de las especies, que se mantienen viables a través del tiempo, fuera de su hábitat natural o lugares de cultivo, en ambientes controlados y con el apoyo de tecnologías apropiadas para dicho propósito.
Se trata de un Banco Activo de semillas, cuyo objetivo es la conservación de material genético a corto y medio plazo. Además, de la ejecución de actividades de recolección, caracterización, evaluación, regeneración, multiplicación, distribución y documentación del germoplasma conservado.
Dispone de una cámara de almacenamiento de 179 m3 con capacidad para unas 12.500 muestras, a unas condiciones de temperatura de -2 ºC y 30 % HR, donde se almacenan en forma de semilla. Dispone de una cámara de desecación para 200 muestras, utilizada para el acondicionamiento previo de la semilla al almacenamiento en unas condiciones de temperatura de 20 ºC y de humedad del 10%.
El material está depositado en botes de cristal cerrados herméticamente, perfectamente identificados, en los que se introduce una bolsa de gel de sílice con el objetivo de asegurar un nivel de humedad en la semilla de entre 3 y 5 %, prolongando el periodo de viabilidad en la semilla almacenada. Este sistema garantiza la viabilidad mínima exigida a la semilla almacenada durante más tiempo, prolongando los turnos de regeneración, minimizando los riegos de pérdida de pureza genética.
El Banco de Germoplasma de semillas de la Orden, alberga las siguientes colecciones:
-Leguminosas Pratenses Anuales, con 5329 registros
-Altramuz, con 1667 registros.
-Especies amenazadas, con 350 registros.
-Medicinales, con 175 registros.