La cámara climática de niebla salina NSS tiene como principio de funcionamiento la pulverización de soluciones agresivas (según el test a realizar) en el interior del habitáculo en el que las muestras a ensayar se encuentran, envolviéndolas y permaneciendo expuestas a ellas bien de forma contínua o cíclica. La resistencia a la corrosión de cada muestra se determina en base a la diferencia de tiempo que trascurre antes de que los primeros efectos corrosivos aparezcan.
Para realizar este proceso el esquipo está compuesto por un receptáculo de ensayo de 500 litros de capacidad y una unidad de control. Ésta está equipada con un tanque de almacenamiento para la solución a pulverizar, así como los instrumentos de control necesarios para el sensor de temperatura, el humidificador de aire, la presión de la pulverización y la duración del ensayo. El rango temperatura de trabajo es de ambiente a 60 ºC.
El receptáculo de ensayo está diseñado con simetría rotacional, que asegura una distribución uniforme de la nebulización salina por toda la zona de ensayo. La compuerta superior de la cámara se abre y cierra neumáticamente, de forma que ambas manos pueden utilizarse para ocuparse de las muestras. Una bomba dosificadora permite variar y ajustar el consumo óptimo de solución salina a aplicar.
Ensayos de corrosión sobre elementos metálicos férricos y no férricos que sean susceptibles al ataque continuado de la humedad, ácidos, disoluciones, gases, etc, y que necesiten encontrar el recubrimiento protector adecuado para prevenir dicha corrosión