Equipo portátil que permite realizar medidas de forma rápida y no destructiva, permitiendo hacer un seguimiento continuado en la misma hoja, en el que el área estudiada es muy pequeña, sólo 2 x 3 mm.
El medidor de clorofila calcula un índice (de 1 a 100) a partir de la densidad óptica diferencial entre las longitudes de onda rojo (650 nm) e infrarrojo (950 nm) detectadas por un fotodiodo situado en el lado opuesto de la hoja respecto a los diodos emisores.
La relación que existe entre la concentración de clorofila y el contenido de nutrientes permite determinar el estado nutricional de las plantas y posibilita el ajuste de las dosis de fertilizantes a las necesidades nutricionales a tiempo real.
De esta forma se evitan desórdenes nutricionales que comprometen la producción y la consecuente contaminación de los acuíferos.